Por eso es importante crear un ambiente de relajación adecuado para dormir placenteramente. Uno de los elementos que no pueden faltar a la hora de descansar es la lencería de cama. ¿Podrías dormir una noche sin sábanas? ¡Obviamente no!
La lencería de cama, conformada por sábanas, edredones y almohadas, es indispensable para lograr ese descanso tan ansiado después un largo día de trabajo. Pero también debes considerar que la ropa de cama no es solamente funcional sino un recurso de decoración que aporta vida a la habitación.
A continuación, te brindamos algunos consejos para que puedas elegir la mejor opción para vestir tu cama y descansar como los reyes.
¡Sábanas, símbolo del sueño placentero!
¿Sábanas de polialgodón? Elígelas a la hora de adquirir tus sábanas ya que la integración de poliéster y algodón permite una mezcla de suavidad, durabilidad y resistencia, ideales para un descanso satisfactorio.
Combina texturas y colores, así evitarás caer en la monotonía. Actualmente existen novedosas texturas que aportan elegancia y clase a tu habitación. Aunque si prefieres los clásicos, el lino y el algodón son muy buenas opciones que te brindarán comodidad y frescura a la hora de dormir.
Como dice el dicho “en gustos y colores”
Los seres humanos somos tan distintos y tenemos preferencias por ciertos colores y materiales según nuestros gustos, de allí el origen de este famoso dicho. A la hora de elegir el edredón ideal para vestir tu cama podrás optar por distintas opciones de materiales, entre aquellas elaboradas en base a algodón o poliéster.
Los edredones de algodón son espectaculares para personas muy sensibles al tacto. Esta lencería está fabricada con un material que absorbe la humedad de un modo realmente eficaz, evitando que se formen esas clásicas bolitas que resultan muy molestosas para quienes disfrutan de la suavidad de la lencería de cama. Con ellos el descanso se convertirá en un verdadero placer y el único problema que tendrás será al levantarte.
Por otro lado, los edredones de poliéster resultan perfectos para las personas que sufren de alergias a otros materiales o al polvo, no solo porque su tejido es hipoalergénico sino porque se pueden lavar con más frecuencia. El poliéster tiene la ventaja de ser resistente y además, por su composición, no se arruga con facilidad, así que ya no tendrás que preocuparte por el tiempo a la hora de hacer la cama.
Recuerda además que para mantener en buen estado los edredones, debes sacudirlos a diario y guardarlos en bolsas de tela así no atraparán olores no deseados.
¿Y las almohadas? Sabemos que son un elemento esencial a la hora de vestir tu cama, es por eso que debes estar atenta a nuestros próximos artículos donde descubrirás las características y funcionalidad de cada una de ellas.
Ahora que conoces las características y beneficios de la lencería de cama será más sencillo seleccionar aquella que más se adapte a tus necesidades. Opta por el material que más cumpla con tus expectativas para que cuando llegue el momento de conciliar el sueño te desconectes del mundo y descanses placenteramente.
Y tú, ¿qué material prefieres?